Hace unos dias que mi suegra me viene diciendo que no le anda la PC porque los hijos le instalaron algo y dejó de funcionar. Obviamente esa pobre PC tenía un Windows XP modificado por alguien que se lo habían puesto para que “ande bien la PC” y para que “Ya no tenga problemas”. Después de haberle pagado a esta persona para dejarle la PC con XP (ya sin soporte) venía todo bien hasta que, como conocemos todos, empezó a aparecerles la bendita pantalla azul de windows. Les apareció tantas veces y la ignoraban tanto que apenas prendida la PC salta la pantalla azul sin ver ni siquiera la flecha del mouse. Después de esto, a quien tuvieron que recurrir? Claro, al geek de la familia, al que “sabe arreglar PCs y trabaja de eso”. Si, se “arreglar PCs” pero que trabaje en sistemas no quiere decir que trabaje de eso. En fin, ahí me di cuenta que esa era mi oportunidad. A mis cuñados quise atraerlos al mundo de GNU/Linux mostrandole las bondades pero siempre me repetían lo mismo: “No puedo jugar al GTA”, “Y donde está el Word?”, etc. Pero esta vez fue totalmente diferente, ahora era mi suegra, el sostén de la familia, la que necesitaba el PC para poder ver su novela favorita porque se la estaba perdiendo. Aproveché uno de esos días en que vamos a comer con mi esposa a la casa de mi suegra. Llevé mi pendrive con Linux Mint 16 XFCE y manos a la obra. “Ahora tenés tiempo para arreglarme la PC no?”, me dijeron, “Claro, en 10 minutos está arreglada”, dije yo. Como habían hasta roto la partición donde tenían el Windows y, obviamente no tenían una particion aparte para backup o para guardar cosas importantes, tuve que borrar el disco entero por no tener el acceso correcto. Creé la tabla de particiones correspondiente: Una para el windows con el mínimo tamaño considerable y una partición para guardar sus documentos y backups. En 10 minutos, como había dicho la PC había vuelto a la vida, solo me tomó unos 10 más para poder dejarlo totalmente actualizado al mint recién instalado. Como ya viene con paquete de ofimática me quedé tranquilo. Le modifiqué un poco el panel del XFCE como para que lo vean al “estilo windows” y se orienten un poco. Y así sin más me fui, sin explicarle a mi suegra que lo que tenía en la PC no era windows sino que era otro sistema operativo. Mi cuñado mas chico me debe estar odiando porque no puede jugar al GTA, pero todavía no le mostré las bondades de Steam y el centro de software de LM. Ayer, mi esposa llamó a su madre por telefono como lo hace habitualmente y aproveché para decirle: “Que te diga como va con la PC”. La respuesta fue increíble: “Dice que anda excelente”. No podía creerlo, mi experimento estaba resueltando. No tuve ninguna queja al instalar el sistema y que hayan visto toda una interfaz nueva (aunque gracias al Whisker Menú se puede disfrazar). Lo único que tuve que hacer de más fue instalar Google Chrome ya que estaban acostumbrados. Un link en el escritorio para Firefox, Chrome y LibreOffice Writer creo que fue la clave, mostrarles que tienen los programas que necesitan. Este fin de semana voy a volver para darle una actualización al sistema y para empezar a explicarles como usar el sistema, digamos así, un curso rápido de operador de GNU/Linux. Continuará…